Prefieren secuestrar a ciudadanos de recursos medios, sobre todo comerciantes
Por Henia Prado
Grupo Reforma
Ciudad de México (17 mayo 2009).- El blanco de los secuestradores ya no son empresarios o gente con alto poder adquisitivo, pues ahora prefieren ciudadanos de nivel económico medio y bajo, sobre todo comerciantes.
Sin embargo, el monto de los rescates aún es elevado, por lo cual para la mayoría de las víctimas es casi imposible pagarlo.
"Vemos que quienes tienen más problemas son comerciantes e incluso pequeños comerciantes", explicó el subprocurador de Averiguaciones Previas Centrales, Javier Cerón.
"Es la parte que yo juzgo terrible, porque son gente que están haciendo su esfuerzo todos los días, que está buscándose la vida todos los días, y les piden cantidades que de verdad a veces las personas no están en condiciones de ni siquiera asimilarlo".
Agentes judiciales comentaron que esta situación provoca que los plagiarios se desesperen al no obtener el dinero que esperan de la familia, por lo cual actúan con mayor saña hacia las personas cautivas, y en ocasiones la víctima es asesinada.
"Lo que hace un secuestrador desde el primer momento en que priva de la libertad es alarmarte, es peligroso y sanguinario, la premisa es la vida de las personas permanentemente, desde ese momento hasta el final.
"Yo no puedo decir que son más o menos (peligrosos), pienso que son siempre igual porque están amedrentando con la integridad y la vida de las personas como una forma de presionar para conseguir sus objetivos", señaló Cerón.
De enero a la fecha, detalló, la Procuraduría General de Justicia del DF (PGJDF) ha iniciado 25 denuncias por el delito de secuestro, de las cuales, cinco fueron simulaciones, esto es, que la víctima se autoplagió o se trató de un homicidio ajeno a la privación ilegal de la libertad.
De los 20 casos restantes, en 15 ya concluyó el plagio, entre ellos el de Antonio Equihua, el joven de 16 años que fue encontrado muerto el domingo 10 de mayo.
Las otras cinco averiguaciones previas corresponden a plagios en los que las víctimas siguen privadas de su libertad.
Además, suman 33 detenidos y consignados ante jueces penales por los plagios.
Cerón destacó que la cifra contrasta con los números del 2008, pues en el mismo periodo se registraron 64 denuncias.
Policías de la Fiscalía para la Seguridad de las Personas e Instituciones indicaron que aunque las cifras del delito muestren disminución, la realidad puede ser diferente, pues muchos ciudadanos no denuncian por temor a afectar a su familiar, o recurren ante la Procuraduría General de la República (PGR).
El subprocurador, quien no dio fecha para el arranque de la Fuerza Antisecuestros (Fas), apuntó que cuando el nuevo esquema entre en operaciones contará con 120 policías investigadores, un grupo especial de respaldo, además de agentes del Ministerio Público, oficiales secretarios y responsables de agencia especializados.
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